Un croissant francés clásico
Busqué una receta para un croissant real durante mucho tiempo, probé docenas de recetas y todas estaban bien, pero en realidad siempre obtenía más muffins que un croissant real. Me embarqué en la aventura de hacer otro croissant nuevamente, sin esperar un milagro, pero nuevamente con la esperanza de no comernos otro fino hojaldre. El resultado ... Estoy abriendo un croissant o ¿debería llamarse de otra manera una tienda que solo vende croissants franceses reales? Pero no importa, mi búsqueda de un croissant clásico se detiene en esta receta, ¡y haz lo que quieras! :-)

Pasos de preparación
- Día 1 Mezclar todos los ingredientes (todos excepto 280 g de mantequilla), amasarlos, pero rápido y no más de 3 minutos, para que no se desarrolle demasiado el gluten, lo que luego resultaría en un estiramiento más difícil del cuerpo. Dale a la masa forma de disco, no de bola, ya que será más fácil extenderla al día siguiente. Ponga la masa en un plato hondo y cúbrala con film transparente. Ponlo en el frigorífico y olvídalo hasta el día siguiente. ¡Mucho trabajo por hoy!
- Día 2 Cortar la mantequilla de la nevera (esos 280 g) en trozos más pequeños y colocarla sobre papel de horno, cubrir con otra hoja de papel de horno. Doble los papeles al tamaño 20x20. Enrolle la mantequilla uniformemente en la dimensión mencionada con un rodillo y devuélvala a la nevera para que se enfríe un poco nuevamente. Estirar la masa a un tamaño de aproximadamente 30x30 cm, lo más uniformemente posible. Coloque un plato de mantequilla sobre la masa, cúbralo con los brazos de la masa, es decir, cierre el plato de mantequilla según el principio del sobre. Enharine ligeramente la superficie de trabajo y comience a enrollar con cuidado la masa para que se mueva desde el centro hacia los extremos. Si la masa “vuelve”, ponla en el frigorífico durante otros 30 minutos. Si es necesario, espolvorear la masa con harina para que no se pegue. Si la mantequilla se puede filtrar en algún lugar, parche el agujero con un poco de harina. Estirar la masa a un tamaño de 20x60 cm. Cuando se alcance esa dimensión, doble cada página por la mitad, luego "ciérrela" como un libro. Envuelva en film transparente y refrigere por 30 minutos. Repite el proceso 3 veces más, así que pon la masa frente a ti como un libro y estírala cada vez hasta el tamaño de 20x60 cm. Después de cada tiempo, deje reposar la masa envuelta en papel de aluminio en el refrigerador durante 30 minutos.
- Día 3 Enharinar ligeramente la superficie de trabajo y extender la masa en una tira larga y estrecha, de aproximadamente 20x110 cm. Si la superficie no es lo suficientemente larga para extenderse a esta dimensión, divida la masa libre en 2 o 3 partes y extienda cada parte. Cuando obtenga una tira larga y estrecha, lo mejor es cortar triángulos con un cuchillo para pizza y girarlos en forma de croissant. Si lo desea, se pueden rellenar con barras de chocolate. Disponga los croissants sobre papel de horno, asegurándose de dejar suficiente espacio. Batir 1 huevo con 1 cucharadita de agua fría con un tenedor y cubrir ligeramente cada croissant. Deje los croissants en un lugar cálido durante 2 horas. Precaliente el horno a 200 grados (ventilador) y el eléctrico ordinario a 220 grados. Después de 2 horas, vuelva a cubrir ligeramente los croissants con huevo y colóquelos inmediatamente en el horno precalentado durante unos 15-18 minutos.
Servicio
La preparación es larga, pero el esfuerzo vale la pena, ¡al final solo se recuerda el resultado final! ¡Buen provecho!