Mermelada de higos libanesa
Esta es una mermelada que va con todo: pan con mantequilla, yogur, avena, queso ... Un ingrediente inusual es la masilla, lo recordaba de los libros donde de vez en cuando alguien lo masticaba sentado frente al café .. Branko Copic ? Ivo Andric? ¡No estoy seguro! La masilla es una resina seca del árbol del mismo nombre (Pistacia lentiscus), con un fuerte efecto antibacteriano y un agradable olor a coníferas. Es conocido y utilizado en la mayoría de países mediterráneos. No es necesario pero le da el sabor y olor originales a esta mermelada.
Pasos de preparación
- Lavar los higos secos, quitarles los tallos y cortarlos en cuartos (me es más fácil usar tijeras y cortar sobre la olla). Cortar el linum por la mitad a lo largo, quitar las semillas y cortar en medias lunas de unos 2 mm de grosor. Agrega 1 litro de agua y cocina a fuego lento hasta que el limón esté suave.
- Triturar las gotas de masilla en una picadora con una cucharada de azúcar en polvo. Este paso es importante porque de lo contrario la masilla no se derretirá. Añadir a la olla con los higos y el limón. Agregue el azúcar restante y el anís estrellado. Cocine durante unos 30 minutos o hasta que los higos comiencen a desmoronarse.
- Coloque las nueces y las semillas de sésamo en una bandeja para hornear y tueste a fuego medio (aproximadamente 150c) durante unos 10 minutos; tenga cuidado de no obtener el color, el sésamo cambiaría de sabor. Agregue nueces y semillas de sésamo a la mermelada. Deje hervir durante uno o dos minutos y vierta caliente en frascos esterilizados calientes. Selle bien con tapas esterilizadas (preferiblemente nuevas)
- Después de abrir, guarde el frasco en el refrigerador, úselo en aproximadamente 3-4 semanas.