Galletas de maíz con calabaza
... sin grasas añadidas, pero llenas de sabor y aroma, para que puedas disfrutarlas sin remordimientos :). Suave por dentro, con una fina y crujiente cáscara de maíz por fuera ...
Pasos de preparación
- Hornea la calabaza en el horno en una sartén cerrada con papel de aluminio, cuando se enfríe un poco, sepárala de la cáscara y el exceso de agua que haya escurrido y cuela. Picar las nueces y las pasas, no muy finas. Batir el huevo con el azúcar, agregar el puré de calabaza y luego todos los demás ingredientes secos. La mezcla será más suave, pero no demasiado suave.
- Deje el bol de masa en el frigorífico un rato para que le sea más fácil darle forma. Coge un poco de la masa con una cuchara y dale forma un poco en la palma (aunque la masa es blanda, no se pega).
- Vierta un poco de polenta en un plato y enrolle ligeramente cada galleta por ambos lados, sin presionar. La polenta contribuirá a la creación de una corteza crujiente cuando se horneen los pasteles.
- Coloca las galletas en una bandeja de horno forrada con papel de horno y hornea en un horno precalentado a 190 C durante unos 15 minutos, hasta que tomen un color dorado. Déjelos en la bandeja para hornear durante unos minutos más, luego transfiéralos a la rejilla para que se enfríen por completo.
Servicio
Las galletas no son muy dulces, por lo que son excelentes como desayuno, con leche, yogur o té.